Soy una seguidora incansable de JORGE LANATA, lo escucho por radio, leo sus publicaciones y miro su programa los domingos. Admiro su sagacidad e ironía para informar y des - ocultar situaciones y "relatos". Como convocada por su programa televisivo y las cuestiones de fundamento que presenta, trato en lo posible de dialogar con su discurso e imágenes. Últimamente me
he implicado también con su escenografía - por lo que también felicito
al equipo que lo acompaña en exteriores e interiores - y; estoy viendo
(no mirando), viendo a su público que lo acompaña en vivo. Mayoría
jóvenes, por lo que se observa saludables, algunos en edad
Universitaria, otros quizá no concurran a estudios superiores pero no
parecen ser personas desinformadas y un alto índice - se me ocurre- de
profesionales. En fin no parecen una clase de público con privaciones
materiales, el aspecto lo amerita. Bien, ¿cuál es mi preocupación en
relación al Título de esto que escribo?, mi preocupación es que los
observo reír con cada ponencia. Yo que miro el programa sola me pregunto
una y otra vez ¡de qué se ríen!, porque lo que es en mi caso personal
paso de la sublevación a la tristeza; de la tristeza al espanto e
indignación. GRACIAS A DIOS NO HE NATURALIZADO NADA. Entonces me
gustaría que tanta juventud se gratifique con una FORMA, una MANERA de
HACER PERIODISMO PARA TODOS pero deseo que también sigan pensando. Por
muchos Jorge Lanata más... ¡que buena falta nos hacen! y, que nadie se
sienta herido.
¡¡QUE NO SEA UN ESPECTÁCULO!!.
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